A cinco meses de las elecciones autonómicas, el deterioro electoral del Partido Popular en Palma se antoja imparable. Ir a noticia y comentarios en UH Según el último estudio del Instituto Balear de Estudios Sociales (IBES), realizado en exclusiva para Ultima Hora, el PP sufriría un retroceso
A cinco meses de las elecciones autonómicas, el deterioro electoral del Partido Popular en Palma se antoja imparable. Según el último estudio del Instituto Balear de Estudios Sociales (IBES), realizado en exclusiva para Ultima Hora, el PP sufriría un retroceso de trece puntos porcentuales en comparación a los resultados conseguidos en 2011 –cuando logró 17 concejales–, y lo sitúa en sólo el 35 por ciento de los votos y entre 11 y 12 escaños en el Ajuntament, a tres de la mayoría absoluta.
Los principales factores de este vuelco electoral son la ligera recuperación del PSOE respecto a la encuesta de septiembre, la reafirmación electoral de Podemos y la defenestración del alcalde Mateo Isern, cuya gestión, sin embargo, es apoyada por la mayoría de palmesanos. En el último caso, la pérdida de votos del PP se atribuyó al «castigo» de sus propios votantes por el divorcio entre el partido, representado por José María Rodríguez, y el alcalde, Mateu Isern.
Consolidación
Las fuerzas progresistas consolidarían, así, la actual representación del ecosoberanismo de Més y el regreso de Esquerra Unida. El panorama político que se dibuja es radicalmente distinto al de la presente legislatura. Sin embargo, el PSOE logra recuperar posiciones respecto a la encuesta del pasado mes de septiembre –nada menos que cinco puntos– y con un 23 por ciento del apoyo electoral lograría entre 7 y 8 ediles, uno menos que en 2011. Este resultado significaría que los socialistas sólo perderían un concejal desde el inicio de la legislatura.
Aunque la opción de Podemos se matiza con respecto a los apoyos de septiembre, el 15 por ciento que le atribuye el trabajo demoscópico significaría lograr entre 4 y 5 concejales y convertirse en auténtico árbitro del futuro institucional del Ajuntament. El ligero repunte de Més no se traduce en un aumento de concejales y conserva los 3 que tiene en la actualidad, mientras que Esquerra Unida lograría 1 escaño. UPyD está al límite de la representación institucional y podría conseguir un concejal, aunque sin opciones de configurar mayorías en uno u otro bando ideológico.
